Putin exige retirada ucraniana total para considerar un alto el fuego (Foto: Instagram)
El presidente de Rusia, Vladimir Putin, ha reiterado este jueves en una rueda de prensa en Biskek, Kirguistán, que cualquier posibilidad de alto el fuego en Ucrania está supeditada a la retirada completa de las tropas ucranianas de las regiones que Moscú reclama como propias: Donetsk, Lugansk, Kherson y Zaporiyia. Estas zonas fueron anexionadas por Rusia en 2022 mediante referendos no reconocidos por la ONU ni por la comunidad internacional.
Putin descartó un cese de hostilidades sin condiciones, argumentando que esto permitiría a Ucrania y a sus aliados occidentales reagrupar sus fuerzas armadas. “Las tropas ucranianas se retirarán de los territorios que ocupan, y entonces cesarán las hostilidades. Si no se retiran, lo lograremos por medios militares”, declaró el mandatario.
Pese a las negociaciones internacionales en curso, Putin aseguró que aún no existe un borrador formal de acuerdo de paz. Según explicó, Estados Unidos —bajo la responsabilidad directa del presidente Donald Trump— ha enviado únicamente una lista de temas a tratar, sin presentar una propuesta definitiva. Una delegación estadounidense viajará a Moscú en los próximos días para continuar el diálogo, aunque los nombres de los enviados no han sido revelados.
Las propuestas de paz divergen entre Washington y Europa. La iniciativa estadounidense contempla reconocer el control ruso sobre Crimea, Donetsk y Lugansk, congelar las posiciones actuales en Kherson y Zaporiyia, y exige que Ucrania renuncie a su ingreso en la OTAN. Esta propuesta ha sido considerada por Putin como una base posible, aunque aún no ha recibido su versión actualizada. Por el contrario, la propuesta europea rechaza cualquier reconocimiento de soberanía rusa sobre territorios ocupados y no impone vetos permanentes a la adhesión ucraniana a la OTAN.
Por su parte, Kiev insiste en que no hará concesiones territoriales, mientras que las potencias europeas buscan mantener una postura unificada frente a cualquier acuerdo que legitime la ocupación rusa.
Putin ha asegurado que Rusia está dispuesta a negociar, pero solo bajo condiciones que garanticen sus objetivos estratégicos. Esto implica que el avance militar seguirá siendo una herramienta clave en la postura del Kremlin.
