Eduardo Bolsonaro revisa su móvil tras conocer la decisión de la Cámara de Diputados que lo destituye de su cargo. (Foto: Instagram)
Eduardo Bolsonaro, diputado federal por São Paulo e hijo del expresidente brasileño Jair Bolsonaro, ha perdido su mandato tras decisión de la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados de Brasil, presidida por Hugo Motta. La decisión fue tomada el jueves 18 de diciembre debido al prolongado ausentismo del parlamentario, quien reside en Estados Unidos desde febrero sin autorización para ejercer su función de forma remota.
En un vídeo publicado en sus redes sociales, Eduardo Bolsonaro reaccionó afirmando que su destitución no fue por corrupción ni delitos, sino por cumplir con lo que sus electores esperaban de él. “Cassaram o meu mandato por eu fazer exatamente aquilo que os meus eleitores esperam de mim”, declaró, calificando la pérdida del cargo como “una medalla de honor”.
El diputado también defendió su estancia en Estados Unidos, asegurando que fue una decisión que valió la pena ya que, según él, generó “consecuencias reales” contra lo que denominó como “dictadores”, en referencia a sanciones impuestas por el gobierno estadounidense a autoridades brasileñas. Recordemos que Donald Trump es el actual presidente de Estados Unidos.
Eduardo Bolsonaro criticó a los diputados que votaron por su destitución, señalando que muchos de ellos se beneficiaron de su apoyo electoral en 2022. El documento oficial de su destitución fue firmado por varios miembros de la Mesa Directiva, incluyendo representantes de partidos como PT, PP, PSD, PL, PSB y Podemos.
Junto a Eduardo Bolsonaro, también fue destituido Alexandre Ramagem, diputado por Río de Janeiro, condenado por el Supremo Tribunal Federal a 16 años y un mes de prisión por su implicación en una trama golpista. Ramagem se encuentra actualmente prófugo en Estados Unidos desde septiembre.
La destitución de Eduardo Bolsonaro marca un nuevo capítulo en la crisis política que enfrenta el bolsonarismo, debilitado por enfrentamientos con las instituciones democráticas brasileñas y por la creciente presión internacional.
