Annalisa Toccara-Jones, una británica de 37 años residente en Sheffield, Inglaterra, ha transformado radicalmente su vida tras perder 57 kilos. La decisión de cambiar surgió después de unas vacaciones en Bali destinadas a personas con obesidad, donde se enfrentó a las limitaciones físicas y emocionales provocadas por su peso, que había alcanzado los 158 kilos (aproximadamente 25 stone).
La muerte de su madre en 2021 agravó su trastorno de alimentación compulsiva, llevándola a buscar consuelo en la comida. Durante el viaje, Annalisa se dio cuenta de que su cuerpo le impedía disfrutar de actividades cotidianas, como abrocharse el cinturón en el avión o participar en excursiones. “Fue el peor y el mejor viaje de mi vida”, confesó.
A su regreso, decidió someterse a una cirugía bariátrica en Turquía en octubre de 2024. Tras la operación, su peso comenzó a disminuir rápidamente, pasando de una talla 32 a una 16. Esta transformación física también tuvo un profundo impacto emocional: “Antes sentía vergüenza de mi cuerpo y pensaba que nadie me querría. Ahora tengo confianza, salgo, viajo y hasta tengo citas”.
Annalisa afirma haber recuperado la autoestima y el gusto por la vida, y espera que su historia inspire a otras personas que atraviesan situaciones similares. “Las vacaciones me hicieron darme cuenta de que necesitaba cuidar de mí”, concluyó.


