Lo que debía ser un viaje tranquilo por una carretera de Minnesota (Estados Unidos) se convirtió en una pesadilla para Katie Olsen, una mujer de 41 años que sufrió un accidente casi fatal en agosto de 2020. Mientras conducía con su hijo en el asiento trasero, una porca metálica de unos 7 cm se desprendió de la rueda de un camión cercano, atravesó el parabrisas y le impactó violentamente en el rostro.
El impacto fue tan brutal que la pieza entró por su cara y salió por la boca, siendo hallada posteriormente debajo del asiento. A pesar de la gravedad de sus heridas, Katie logró detener el vehículo y proteger a su hijo, quien resultó ileso.
Las consecuencias fueron devastadoras: múltiples fracturas faciales, incluyendo mandíbula y órbita ocular, pérdida de dientes y cicatrices profundas. Durante cinco años, Katie se sometió a más de 30 cirugías reconstructivas, incluyendo injertos óseos, y continúa recibiendo tratamiento médico y psicológico.
Cinco años después del accidente, Katie decidió compartir su historia en TikTok para concienciar sobre la importancia del mantenimiento vehicular. En el vídeo, que superó 1,4 millones de visualizaciones y 194.000 “me gusta”, mostró la misma porca que le cambió la vida y lanzó un mensaje claro: “Apretad los tornillos de las ruedas. Esto puede salvar vidas”.
Katie agradeció a todos los que la ayudaron en su recuperación, desde los primeros socorristas hasta médicos, terapeutas y desconocidos. Su historia ha generado una ola de solidaridad en redes sociales y ha servido como un llamado a la prevención en carretera.