El joven delantero brasileño Pedro Severino, de tan solo 19 años, ha protagonizado una emotiva y sorprendente recuperación tras haber estado al borde de la muerte debido a un grave accidente de tráfico. El siniestro ocurrió el 4 de marzo de este año, cuando Pedro se dirigía desde Ribeirão Preto hacia Atibaia (São Paulo), donde debía presentarse ante el club Red Bull Bragantino, al que había sido cedido por el Botafogo-SP.
El impacto del accidente fue tan severo que, tras ser sometido a una cirugía de emergencia en Americana (SP), los médicos llegaron a iniciar el protocolo de muerte encefálica. Sin embargo, el procedimiento fue suspendido al detectar una tos involuntaria, signo de actividad neurológica que indicaba que Pedro aún tenía posibilidades de recuperación.
Meses después del trágico suceso, Pedro ha vuelto a entrenar en el campo, como se ha podido ver en un vídeo difundido por su terapeuta ocupacional, Larissa Carvalho. En las imágenes se le observa corriendo y chutando el balón con ayuda de su padre, Lucas Severino, y del equipo médico que lo ha acompañado durante su rehabilitación. La terapeuta destacó en redes sociales que la evolución de Pedro, pese a las dificultades, ha sido una fuente de motivación para todos los involucrados en su tratamiento.
El joven fue homenajeado recientemente en el Estadio Santa Cruz/Arena Nicnet, en Ribeirão Preto, donde dio el saque inicial en un partido de la Serie B entre Botafogo-SP y Athletico-PR. Su historia ha sido considerada por muchos como un milagro, y cada pequeño avance en su recuperación es celebrado como una gran victoria, tanto dentro como fuera del terreno de juego.
La historia de Pedro Severino ha conmovido a miles de personas en Brasil y en el extranjero, convirtiéndose en un símbolo de superación y esperanza.