Un hombre identificado como Aidas J., de nacionalidad lituana, fue arrestado en Alicante, España, tras defraudar al menos 20 restaurantes mediante una curiosa y reiterada estafa: fingía ataques cardíacos para evitar pagar sus consumiciones. Apodado por la prensa como el “Gastrojeta”, Aidas desarrolló una elaborada actuación que incluía caídas al suelo, manos al pecho y supuestos desmayos justo después de disfrutar de comidas de alto nivel.
El modus operandi del estafador consistía en acudir a restaurantes de renombre, ordenar platos sofisticados como paella, mariscos y bebidas premium, incluyendo whisky, y luego simular un infarto para eludir el pago. En algunos casos, incluso solicitaba asistencia médica. Fue finalmente detenido en un restaurante de la Calle Mayor, cuando intentaba repetir el engaño y fue sorprendido por la Policía Nacional. Según los agentes, Aidas se mostró sonriente durante su arresto y no parecía preocupado por pasar tiempo en prisión.
El gerente del restaurante El Buen Comer, una de las víctimas, relató que el hombre llegó a pedir dos dosis de whisky en una sola comida antes de fingir el colapso. En total, el perjuicio económico causado a los establecimientos alcanzó los 766 euros. Para reforzar su imagen de cliente adinerado, el estafador vestía ropa de marca.
El caso ha generado gran repercusión en medios españoles por la audacia del implicado y la repetición meticulosa del fraude. Las autoridades investigan si hay más incidentes similares no denunciados y no se descartan nuevas imputaciones.