Putin y Trump durante un encuentro en el G20: convergencia estratégica. (Foto: Instagram)
El gobierno ruso ha expresado su aprobación general hacia la nueva estrategia de seguridad nacional presentada por la administración del presidente estadounidense Donald Trump. Según Dmitri Peskov, portavoz del Kremlin, las directrices estadounidenses están "globalmente en conformidad" con la visión del mundo que sostiene Rusia. En una entrevista con la televisión pública Rossia, Peskov destacó que esta estrategia podría servir como una "garantía modesta" para seguir colaborando de forma constructiva en la búsqueda de una solución pacífica al conflicto en Ucrania.
El documento divulgado por la Casa Blanca marca un giro importante en la política exterior de Estados Unidos, con un enfoque más nacionalista y una atención renovada hacia América Latina. En ese sentido, se confirma una revitalización de la Doctrina Monroe, con el objetivo declarado de restaurar la preeminencia estadounidense en el hemisferio occidental. Esta medida busca proteger tanto el territorio estadounidense como asegurar el acceso a regiones clave en América Latina, donde Trump mantiene tensas relaciones con países como Colombia y Venezuela.
Otro punto relevante del documento es el anuncio de que la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) no se ampliará, lo cual representa un revés para las aspiraciones del presidente ucraniano Volodymyr Zelensky, quien considera la expansión del bloque una posible vía para alcanzar la paz en su país. En cuanto a Europa, el texto critica duramente a la Unión Europea, acusándola de contribuir a un supuesto riesgo de “extinción civilizacional”, mientras que evita cualquier crítica directa a Rusia.
Esta postura ha sido bien recibida en Moscú, donde se interpreta como una oportunidad para mejorar las relaciones bilaterales y reducir tensiones en regiones estratégicas. El respaldo del Kremlin a las medidas de Trump sugiere un posible alineamiento de intereses en ciertos temas clave de la política internacional.
