Lisa Wootten, una mujer británica de 37 años residente en Essex, fue diagnosticada con un tumor cerebral pocos días después de dar a luz a su primer hijo, Noah, concebido mediante fecundación in vitro. La historia fue compartida por la propia Lisa a través de la organización Brain Tumor Research, revelando que durante meses sufrió convulsiones atribuidas erróneamente a problemas nerviosos.
Tras separarse de su marido, Lisa decidió ser madre soltera y comenzó un tratamiento de fertilización in vitro. Aunque se encontraba en excelente estado físico al iniciar el proceso, ya presentaba síntomas neurológicos desde antes del embarazo, como temblores en el lado izquierdo del cuerpo. En un principio, los médicos descartaron un accidente cerebrovascular y diagnosticaron una infección renal.
Durante el embarazo, las convulsiones se intensificaron. En la semana 38 de gestación, sufrió una crisis tónico-clónica de 35 minutos que obligó a realizar una cesárea de emergencia. Noah nació sano, pero el parto marcó el inicio de una etapa aún más desafiante.
Poco después, nuevos exámenes revelaron un tumor de 5 centímetros en el cerebro, identificado como un meningioma. Lisa fue sometida a una cirugía en diciembre, aunque los médicos no pudieron extirpar completamente el tumor. Actualmente convive con un 5% del mismo, lo que le ha provocado epilepsia y la obliga a tomar medicación anticonvulsiva de por vida.
Pese a las dificultades, Lisa se muestra agradecida por poder ver crecer a su hijo. Comparte su día a día en redes sociales y colabora con campañas de recaudación para la investigación de tumores cerebrales. “Tener a Noah me ha mantenido emocionalmente fuerte. Quiero estar presente para cada uno de sus primeros momentos”, afirmó.


                            
                            
                            
                            
                            