La periodista Elayne Costa, de 38 años, descubrió que padecía un cáncer de mama gracias a un gesto inesperado de su gata Clarisse. El animal, que suele dormir sobre su dueña, comenzó a “amasar” insistentemente una zona específica del pecho de Elayne, lo que le causó molestias. Este comportamiento inusual la llevó a acudir al médico, donde tras varios exámenes se le diagnosticó un cáncer de mama en estadio 3, del tipo triple negativo, uno de los más agresivos.
Elayne buscó ayuda médica apenas dos días después del incidente. Aunque el primer diagnóstico sugería un simple quiste líquido, una biopsia posterior confirmó la presencia del tumor. A partir de entonces, inició un tratamiento intensivo de quimioterapia que duró cinco meses, durante los cuales contó con el apoyo de su familia, amigos y asistencia psicológica. Pese a los duros efectos secundarios, como la caída del cabello y el dolor físico, Elayne se mantuvo firme en su lucha.
La periodista explicó que el tipo de cáncer que padece es especialmente agresivo por su rápido crecimiento, alta capacidad de diseminación y elevado índice de reincidencia. Tras completar la quimioterapia, celebró el final de esta etapa junto al personal médico y se prepara ahora para una cirugía preventiva de mastectomía bilateral, con el objetivo de reducir el riesgo de una recaída.
Elayne ha decidido compartir su historia para concienciar a otras mujeres sobre la importancia de realizarse controles médicos regulares. “Muchas mujeres tienen miedo de hacerse los exámenes, pero eso es lo que puede salvar una vida”, afirmó. Su testimonio ha ganado visibilidad en redes sociales, donde promueve la detección precoz como herramienta clave en la lucha contra el cáncer.