Una niña de 11 años fue reconocida como heroína en San Antonio, Texas (Estados Unidos), tras intervenir de forma decisiva durante una emergencia médica que sufrió su madre mientras conducía. El incidente tuvo lugar cuando Jenna Lester empezó a sentirse mal al volante, presentando síntomas como temblores, palpitaciones y visión borrosa. Logró detener el coche en el arcén y pidió a su hija, Krista, que llamara al 911.
A pesar del pánico inicial, Krista mantuvo la calma y proporcionó información precisa a los servicios de emergencia. Mientras su madre sufría convulsiones y perdía la consciencia, la niña logró colocar el vehículo en punto muerto para evitar un accidente. Su rápida actuación permitió que los bomberos de la Estación 47 llegaran a tiempo y se hicieran cargo de la situación.
El teniente Kevin Zigmond, presente en la intervención, elogió la madurez y serenidad de Krista, afirmando que fue “increíble” ver a una niña tan joven manejar una situación tan crítica con tanta compostura. Además de asistir a la madre, los bomberos también ayudaron al hermano de Krista, Kaleb, que se encontraba solo en casa, y retiraron el coche de la zona de peligro.
Tras el suceso, la familia se reunió con los bomberos en un emotivo encuentro en el que Krista fue homenajeada por su valentía. Kaleb expresó su agradecimiento diciendo que los socorristas no solo salvaron una vida, sino tres, y los calificó como “héroes sin capa”.
El acto heroico de Krista ha sido ampliamente celebrado en la comunidad local, destacando la importancia de la preparación y la calma en situaciones de emergencia, incluso entre los más jóvenes.