Nayara Macedo das Virgens, más conocida como Any Awuada, vuelve a estar en el punto de mira, esta vez no por los rumores de una fiesta con Neymar, sino porque está en el centro de una investigación policial. La influencer, de 25 años, fue detenida el miércoles 21 de mayo en Mogi das Cruzes, en el Gran São Paulo (Brasil), como sospechosa de dirigir una trama de falsificación y venta de cosméticos y perfumes adulterados, anunciados como importados en sus redes sociales.
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La detención fue confirmada por la Secretaría de Seguridad Pública de São Paulo (SSP-SP) el jueves 22. En la operación también fueron detenidas otras dos mujeres, entre ellas la madre de Nayara, Ângela de Macedo, de 50 años, y Júlia Gabriela de Siqueira Freitas, de 27. Todas ellas han sido arrestadas temporalmente.
Según la investigación, que comenzó tras una denuncia presentada en agosto de 2023, los productos vendidos contenían sustancias como metanol y etanol en concentraciones irregulares, y no estaban registrados en Anvisa. Una víctima declaró haber pagado alrededor de 130 euros por botellas supuestamente de las marcas Chanel, Dior y Victoria’s Secret, pero recibió artículos falsificados.
Durante la operación, la policía se incautó de una gran cantidad de cosméticos, así como de un Audi Q3 blanco valorado en más de 23.000 euros registrado a nombre del influencer. Las investigaciones también revelaron transacciones financieras sospechosas: 185.000 euros en la cuenta de Nayara, 92.500 euros de su madre y 42.260 euros de Júlia.
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Any se hizo nacionalmente conocida después de que su nombre apareciera en relación con una supuesta fiesta con Neymar, celebrada en una finca del interior de São Paulo. En aquel momento, se especuló con la presencia del jugador después de que su helicóptero fuera visto en el lugar. Desde entonces, Nayara utilizaba las redes sociales para publicitar una imagen de lujo y ostentación, que contribuía a dar credibilidad a sus ventas de supuestos «productos importados desprendidos».
En el momento de la detención, se encontraba en la vivienda una niña, hija de Nayara, que fue entregada a su tía materna con autorización de su madre. Julia, por su parte, fue localizada en otra dirección indicada por Nayara durante la actuación.