A los 29 años, Gillian Kgotla decidió convertir su imagen en un acto de valentía. Diagnosticada con el síndrome de Parry-Romberg, una enfermedad rara y progresiva que hace que parte de su cara se hunda, esta joven de Sussex (Inglaterra) se ha convertido en una voz de empoderamiento en las redes sociales. En una entrevista con The Sun, contó cómo aprendió a aceptar el drástico cambio de su aspecto y hoy inspira a miles de personas con vídeos motivadores.
“Siempre sonrío a mi reflejo en el espejo”, afirma Gillian, que ya ha conseguido que uno de sus vídeos más populares en Facebook sea visto por más de 2,2 millones de personas. Su actitud positiva es el resultado de un largo proceso de accesibilidad, que comenzó con sus primeros síntomas a los 12 años.
Todo empezó con lo que parecía una tiña alrededor de su ojo izquierdo: “Los médicos me dieron las cremas descritas, pero la defensividad volvió y mi cara empezó a derretirse. Lo que parecía un simple problema evolucionó rápidamente hacia algo más grave e inexplicable”.
La progresión de la afección fue rápida y, en sus palabras, devastadora: “Un día se me encogía el ojo, al siguiente se me deterioraba la nariz, luego la mejilla. Cada día aparecían nuevos síntomas que cambiaban todos los aspectos de mi vida”.
Aunque los primeros signos aparecieron en su adolescencia, a Gillian no se le diagnosticó oficialmente el síndrome hasta este año, más de una década después de la aparición de los síntomas. Ahora, utiliza su historia para desmitificar la enfermedad y promover la accesibilidad. “Mi historia forma parte de lo que soy”, afirma.
A pesar de recibir mensajes de apoyo, así como preguntas difíciles en las redes sociales, Gillian garantiza que su autoestima permanece intacta. “No odio mi aspecto. Acepto en quién me he convertido”, concluye.