Pedro Sánchez propuso una definición más amplia del gasto en defensa que incluya ciberseguridad, antiterrorismo y combate al cambio climático, en sus declaraciones más importantes desde el regreso de Donald Trump al poder en Estados Unidos.
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Aunque reiteró que Madrid alcanzará el objetivo de la OTAN del 2% del PIB antes de 2029, argumentó que deben considerarse amenazas distintas a una invasión rusa. “Para cualquier país del este europeo, nórdico o báltico, la amenaza exige una respuesta donde la disuasión depende principalmente de la inversión en defensa”, señaló durante su comparecencia del jueves.
“Pero en España no es el caso. Nuestra amenaza no es Rusia trayendo sus tropas a través de los Pirineos. Es más una amenaza híbrida de ciberataques. Debemos hablar fundamentalmente de seguridad”, explicó el mandatario español.
España gasta menos que cualquier otro miembro de la OTAN en defensa como porcentaje del PIB, alcanzando un estimado de 1,28% en 2024. El país está bajo la lupa junto con otros rezagados como Italia, mientras Trump ha pedido a Europa pagar más por su propia seguridad y ha sugerido un 5% como nuevo objetivo de gasto para la OTAN.
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Sánchez evita grandes compromisos de gasto debido a la resistencia de su socio de coalición de izquierda y otros legisladores cuyos votos necesita para alcanzar la mayoría parlamentaria. También está limitado por una tendencia pacifista en la sociedad española arraigada en la experiencia de la dictadura militar del siglo XX.
El presidente español lucha por conseguir suficientes votos para aprobar el presupuesto de 2025. Al mismo tiempo, el crecimiento económico de España, que el año pasado se expandió más rápido que cualquier otra economía avanzada importante, significa que el valor en euros del objetivo del 2% está aumentando.
Tras un día de conversaciones con los líderes de los partidos políticos del país, Sánchez abogó por una visión de seguridad “de 360 grados”. Afirmó que los políticos de otros países deben reconocer que los peligros que enfrentan España y el sur de Europa se extienden al terrorismo y los desastres alimentados por el calentamiento global. “Están relacionados con la defensa civil y la amenaza real de la emergencia climática en el Mediterráneo”, subrayó.
Los países que ya alcanzan el objetivo del 2% están decididos a rechazar esta iniciativa liderada por España. Un diplomático comentó: “Si acordamos que se necesita urgentemente más financiación para la defensa ante un ‘peligro claro y presente’, todo lo demás es secundario”.


