Vitória Amancio Cardoso, de Vinhedo (Brasil), aún no tiene dos meses, pero ya ha captado la atención de miles de personas en las redes sociales. La niña nació con una mancha blanca en el pelo, heredada de su madre, Pamella Sandy Amancio Cardoso. La enfermedad, llamada piebaldismo, es genética, hereditaria y poco frecuente, y provoca cambios en la producción de melanina que pueden afectar a la piel y el cabello.
++ El Papa Francisco agradece las muestras de cariño durante su hospitalización
Pamella compartió vídeos de su hija en su perfil de Instagram, que han alcanzado más de 26 millones de visitas. “Ya tenía este perfil, con unos mil seguidores. Pero desde que nació Vitória, el 26 de diciembre de 2024, he ganado 25.000 seguidores. Todo el mundo quería verla. Eso no es mérito mío, es de ella”, dijo la mamá en una entrevista con CRESCER.
Sin embargo, no todos los comentarios son positivos. “Hay gente que no lo entiende, dicen que parece que el bebé está calvo, que parece una señora de 80 años que acaba de nacer. Pero no es eso. Es una falta de pigmentación. Intento explicárselo a todo el mundo, pero no lo entiendo”, dijo.
Al igual que su hija, nació con mechas blancas en el pelo y manchas en la piel. “Es una herencia genética de mi padre. Cuando nací, mi madre me dijo que todas las enfermeras venían a verme, porque era algo nuevo. Nací con mucho pelo y bicolor”, explicó.
++ Zelensky dispuesto a renunciar a cambio de la paz en Ucrania
Pamella siempre fue una niña que llamaba la atención. “Siempre estaba rodeada de preguntas y todo tipo de miradas. Pero nunca me escondí. Mi madre siempre se aseguró de que me dejara ver. Eso me acostumbró, me aceptó y me explicó lo que tengo”, dijo.
Cuando se quedó embarazada, Pamella ya se imaginaba que su hija podría heredar la misma enfermedad. “En cuanto nació, la primera pregunta que me hice fue: ‘¿Tiene las manchitas? ¿Tiene manchas? Todas las enfermeras se volvieron hacia mí y vinieron a quitarme el gorro para verme el pelo. Fue entonces cuando la gente entró en razón y se dio cuenta de que tenía la misma enfermedad genética que yo”, recordó.
La madre se emocionó al ver que su hija era como ella. “Mi reacción cuando la vi fue: ‘Es igual que yo. Dios mío, es mi clon’. Dios me escuchó durante los nueve meses que le pedí que estuviera sana, que fuera guapa, que tuviera el pelo como el mío y que fuera feliz”, dijo.
Cuidados especiales
Pamella explicó que necesita algunos cuidados especiales debido a su piebaldismo. “Por ejemplo, si voy a una piscina con mucho cloro, el mechón blanco se vuelve verdoso. Si voy a la playa y tomo mucho el sol, se vuelve amarillo. Así que uso un champú morado, pero no demasiado, hay que dosificar la cantidad, porque si no mi pelo absorberá la pigmentación morada”, contó.
También tiene que protegerse del sol, ya que la falta de melanina en las manchas aumenta el riesgo de cáncer de piel. “Hay que ponerse mucha crema solar en la cara, sobre todo cuando se va a la playa. También llevo ropa de manga larga y permanezco a la sombra, porque no tengo melanina en las manchas. Aparte de eso, es vida normal”, concluyó.
